La serie en curso de Sam Michelle explora el cuerpo como imagen en movimiento; en relación con el plano físico, con el tiempo y consigo mismo. Su obra es una conversación sobre la memoria, tal y como se almacena dentro y fuera del cuerpo. La forma humana se convierte a la vez en sujeto y recipiente de una serie de movimientos comprometidos con lo sensorial. Estas formas en evolución cuestionan la experiencia corporal de vivir dentro del cuerpo como vehículo de placer y dolor. Comenzando como un ritual improvisado pero calculado, su cuerpo sirve como herramienta de captura del movimiento. El cuerpo sirve de paisaje a gestos íntimos y movimientos etéreos que involucran activamente los sentidos y envuelven al espectador. Sam Michell ha expuesto en el Reino Unido, Estados Unidos y México.